¿Has escuchado hablar de los “gastos hormiga”? Son desembolsos económicos de pequeñas cantidades que parecen no tener un reflejo en las finanzas personales, pero que en realidad podrían estar afectando tu economía. Descubre cuáles son y cómo reducirlos.
Es común pensar que un gasto de una cantidad pequeña pasará desapercibido en tu economía, sin embargo justo estos gastos se denominan también “fuga” porque al sumarse mensual y anualmente sí representan un gasto mayor. Además, en la mayoría de los casos como se perciben como gastos pequeños, no se contemplan en el presupuesto mensual.
Al identificar estos gastos y reducirlos podrás dedicar estos fondos a un fin productivo como al ahorro o a invertir.
¿Cómo deshacerte de estas fugas de dinero?
El primer paso es identificar cuáles son estos gastos también llamados fantasma o vampiro, que están afectando tus finanzas sin que te des cuenta, algunos ejemplos de estas fugas de dinero son:
- Tomar café fuera de casa: si la visita a tu cafetería favorita cuesta en promedio $70 pesos y vas a comprarlo por lo menos 4 veces a la semana en total son $280 a la semana y al mes serían aproximadamente $1,260 pesos y al año $15,120, una cantidad significativa que podrías usar con otros propósitos. La solución sería elegir un día a la semana para no renunciar por completo a este gusto pero elegir prepararte en casa o en la oficina tu café el resto de los días, podrás ahorrarte (en el escenario mencionado) $11,760 pesos al año.
- Comida a domicilio o por aplicaciones: comprar tu comida y prepararla en casa siempre será la versión más económica y aunque a veces se elige comer fuera, es importante contemplar lo que esto implica. En promedio se calcula que comer en un restaurante es en promedio 80% más costoso que comprar los productos y cocinar en casa. Cuando se trata de una aplicación de comida, en muchos casos los restaurantes elevan sus precios cuando se ofrecen en apps para compensar el porcentaje de comisión que éstas le cobran; además se contempla el envío, impuestos, servicio y propina que cobras las aplicaciones. En algunas ocasiones el costo de pedir comida por aplicación puede incrementar hasta un 35% a diferencia de pedirlo directamente en el restaurante. Por lo que para eliminar este gasto, te recomendamos tratar de realizar la mayor cantidad de comidas en casa y si decides pedir que sea directo en el establecimiento, además de tratar de ir a recoger el pedido tú mismo para evitar los gastos antes mencionados.
- Suscripciones a servicios de streaming: las plataformas de streaming tiene un costo mensual de entre $99 y hasta $300 pesos al mes. Si cuentas con varias de ellas podrías estar gastando en promedio $900 pesos al mes y anualmente casi $11,000 pesos. No es necesario renunciar a todo, solo revisar cuáles estás pagando y si realmente se está aprovechando, si ya no la usas hace un tiempo o ya viste todo el contenido que querías ver podrías quedarte con la que tenga la mayor cantidad de programas o películas de interés para ti.
- Transporte en plataforma, coche o taxi: por comodidad es posible que elijamos transportarnos en taxi o por medio de una plataforma incluso para distancias cortas, sin embargo esto puede ser un gasto recurrente que se vaya sumando y te esté afectando financieramente. De igual manera, usar el coche implica gasto de gasolina y peajes en muchas ocasiones, elegir caminar cuando sea posible es una buena manera de evitar esta fuga de dinero y al mismo tiempo es una manera de ejercitarse y de contribuir a cuidar el medio ambiente, al reducir la contaminación que implica usar el coche.
La mejor manera de identificarlos es llevar una bitácora durante un mes en donde anotes todos los gastos que tienes al mes, dale importancia a todos los desembolsos de dinero no importa cuán pequeños sean. De esta manera harás consciencia de los gastos innecesarios que podrán ayudarte a ahorrar y llevar al final de mes con menos adeudos.