29/10/2020 Sorteos Tec
Tiempo de lectura: 3 minutos
En ocasiones se comete el error de pensar que los hijos no deben involucrarse en los temas financieros de la casa... Aunque no tienes que preocuparles ni darles demasiados detalles, puedes empezar por explicarles cómo funciona la economía del hogar.
De esta manera, ellos tendrán información de primera mano de la economía de la familia y desarrollarán un interés por ayudar. Puedes darles a su vez tips para ahorrar con los cuales puedan colaborar y se sentirán útiles.
No específicamente de su historia en la humanidad, sino de cómo se obtiene, de dónde proviene y qué lo genera, que básicamente son el esfuerzo y el trabajo.
Es importante que nuestros hijos conozcan que el dinero es fruto de la responsabilidad y que no llega por sí solo. De esta manera, podrán darle más valor aún al saber que hay que cumplir con una actividad para obtenerlo.
Motívalos a generar su propio dinero, ya sea haciendo algo que les guste, aprendiendo un nuevo oficio o poniendo en práctica alguna habilidad. La idea es que ellos aprendan a cuidarlo y sean conscientes de la necesidad de optimizar su uso.
Esto no significa que debas poner a tus hijos a trabajar desde ya, pero sí de ofrecer pequeñas recompensas por responsabilizarse por diferentes actividades como sacar la basura o lavar el auto.
Así obtendrán a cambio una pequeña retribución monetaria con la que pueden ir creando un fondo de ahorro para lo que necesiten o algo que realmente quieran.
Incentívalos a usar su dinero para momentos en que realmente lo necesiten y que valoren el esfuerzo para obtenerlo.
No olvides que tus hijos te tienen como pilar en su vida, así que muchas de las acciones que hagas pueden reflejarse en ellos.
Enséñalos a ahorrar con tu propio ejemplo, estableciendo y dejando claro cuáles son las prioridades de la familia para mantener su bienestar. Evita los gastos excesivos o que no sean totalmente necesarios.
El dar un concepto errado del uso del dinero puede llevarlos a pensar que no tiene importancia cuidarlo. Los adolescentes están en proceso de formación de sus valores y muchas de las cosas que vean o interpreten pueden repercutir en sus acciones a futuro.
Enséñalos a planificar sus gastos, su ahorro y sus ingresos; no de una manera muy formal pero que vayan entendiendo la importancia de organizar su dinero.
Aquí también puedes incluir la fijación de objetivos económicos de manera que tengan una motivación para ahorrar, cuidar de cómo gastan el dinero y no restarle valor a ello.
Deja que tomen sus propias decisiones en cuanto al uso de su dinero pero guíalos y ayúdalos a priorizar lo que realmente es necesario. Igualmente, puedes enseñarles diferentes métodos para ahorrar dinero que puedan poner en práctica.
El tener una mala gestión del dinero trae grandes consecuencias a corto o largo plazo por lo que debes dejarles claro lo que puede ocurrir al derrocharlo.
Niños y adolescentes son capaces de asimilar muy bien este tipo de información siempre y cuando se sientan parte del proceso. Si los educas desde esta etapa serán adultos mucho más responsables y planificados, con un cuidado especial por el valor del dinero.
No esperes más y empieza desde ya a incentivar a tus hijos a ahorrar.
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