Consejos para mejorar tus finanzas del hogar

La planificación es un factor esencial para que las familias estén preparadas para enfrentar sus responsabilidades financieras a tiempo y sin mayores complejidades.

Tener conocimiento fiel y preciso del nivel de gastos e ingresos es lo que permite encontrar un punto de equilibrio que además, deje un margen para el ahorro.

Planificar las finanzas del hogar ayuda a evitar las compras impulsivas y deudas, lo que facilita que empiecen a cumplir el sueño de construir un patrimonio al comprar bienes como casas y vehículos.

Para planificar los gastos de la familia no es necesario tener conocimientos especializados en finanzas o economía. Solo sigue estos consejos y en poco tiempo lograrás mayo orden y estabilidad financiera. 

1. Suma todos los ingresos familiares

Lo que ganas determina cuánto puedes gastar. El primer paso de esta planificación es identificar todos los ingresos de la familia para luego sumarlos y obtener un total.

Es importante tener en cuenta que existen ingresos fijos, como puede ser un salario, y variables como comisiones por ventas y honorarios por servicios independientes.

Preferiblemente, en este listado incluye aquellos ingresos seguros.

2. Identifica los gastos esenciales y calcúlalos

Las compras de súper del mes, servicios como electricidad, internet, colegiaturas, entre otros son gastos esenciales que debes costear cada mes.

Es importante que detectes todos los gastos con esta característica y que los sumes para obtener un total, el cual no debe ser igual ni muy cercano al total de ingresos familiares.

En caso de que los gastos básicos e “innegociables” sean del mismo nivel de los ingresos, la señal es clara: tu familia necesita generar ingresos adicionales. Para lograrlo puedes aprovechar opciones de emprendimiento y trabajo flexibles, como ventas por Internet o incluso puedes convertirte en colaborador voluntario. 

3. Identifica gastos no esenciales y calcúlalos

Calcula cuánto gasta tu familia mensualmente en cosas que no son esenciales, como visitas a restaurantes, salidas al cine y compra de ropa.

Este proceso de planificación debe conllevar un análisis profundo de estos gastos y su impacto en la cotidianidad, para que intentes disminuirlos a su mínima expresión, sin afectar la calidad de vida y el esparcimiento eventual.

4. Proyecta gastos variables

Lamentablemente, siempre se nos escapan gastos de las manos, ya que con el pasar del tiempo surgen eventualidades y necesidades.

Reparaciones al coche familiar o del hogar, servicios médicos son algunas de las cosas que demandan gastos que normalmente no planificamos.

Para que puedas proyectar los mismos, suma todos los gastos de este tipo que enfrentaste el pasado año y divídelo entre doce meses. El resultado es el monto promedio mensual de gastos variables.

5. Crea un presupuesto coherente y ajustado a la realidad

En este punto ya tendrás un total de ingresos y un total de gastos, tanto esenciales como no esenciales y variables.

Con base en ello, podrás hacer un presupuesto coherente que te permita cubrir todas tus responsabilidades financieras, así como los gustos y “lujos”, sin comprometer las finanzas familiares.

Este presupuesto, que debe ser coherente y ajustado a la realidad, es el resultado final y documentado de tu planificación de gastos del hogar.

6. Analiza los resultados

La planificación de gastos del hogar es una tarea que no se detiene. Una vez que hayas cumplido los pasos anteriores, evalúa qué tanto se adapta tu familia al presupuesto y de qué forma cambian las necesidades y responsabilidades económicas.

Esto te permitirá detectar problemas y tendencias negativas a tiempo y te ayudará a identificar cuándo es el momento ideal para replantear tu presupuesto y planificación, tomando en cuenta las nuevas necesidades de tu familia y el costo actualizado de la vida.

¡Estos son los 6 pasos básicos para planificar los gastos del hogar! Como ves, es un proceso sencillo, que simplemente demanda seguimiento, análisis y disciplina.

¡Tú puedes lograrlo!