4 consejos para marinar carne como los expertos

Si usas los ingredientes adecuados, preparas una buena marinada y aplicas unos trucos de cocción, con seguridad obtendrás un resultado delicioso y dejarás con la boca abierta a todos tus invitados.

No necesitas muchos ingredientes, tampoco tienes que gastar mucho dinero para crear un buen adobo; se trata de aplicar técnicas básicas de cocina para que te luzcas como todo un chef profesional.

Veamos entonces de qué se trata. Después de todo, hacer una buena carne asada el fin de semana es la excusa perfecta para propiciar un encuentro familiar y reforzar la relación con los amigos.

¡Empecemos!

1. Tener los ingredientes básicos

Para preparar una buena marinada es fundamental contar con una lista de ingredientes básicos.

• La sal es la base de cualquier adobo. Su principal función es hacer que la carne absorba bien la marinada. Permite que el adobo se mantenga húmedo, sobre todo en las zonas más secas de la carne. Gracias a este ingrediente se produce la ósmosis, que hace que los jugos de la carne salgan y luego se mezclen con el sabor de la marinada.
• El aceite es otro de los imprescindibles de una marinada, sobre todo cuando decides combinarla con especias. Y es que la mayoría de las hierbas revelan mejor sus sabores cuando se combinan con el aceite. Esto otorga un sabor único y diferente a la carne.
• La salsa de soja puede servir como un sustituto de la sal, e incluso se podrían combinar, siempre y cuando sepas distribuir las cantidades para que no se te pase de sabor. Y es que esta salsa tiene un componente considerado como un potenciador de sabores.
• Azúcar o miel también forman parte de la receta base para una buena marinada. Un toque dulce ayuda a intensificar el sabor de la carne, además de aportarle una corteza crujiente cuando se pone a asar en la parrilla.

2. Cortar la carne antes de marinar

Hacer algunos cortes en la pieza de carne que deseas marinar siempre ayudará a que la salsa sea absorbida de mejor manera.

Una de las formas más comunes de hacerlo es, con la ayuda de un tenedor, agujerear la carne para que los jugos penetren mejor. También se puede emplear un cuchillo, sobre todo si se trata de piezas grandes de carne.

Este paso también se puede reforzar con una inyectadora. De esta forma nos aseguramos de que el adobo penetre en las partes más gruesas de la carne para aportarles más sabor.

3. Cubrir la carne entera con la marinada

La pieza de carne que elijas para tu asado debe cubrirse completamente con la salsa marinada. Para asegurarte de que quede uniforme podrías usar una bolsa, preferiblemente de las que tienen cierre hermético, ya que esto te permitirá, cada cierto tiempo voltearla para que los jugos escurran de un lado a otro.

Si no tienes bolsas de este tipo también lo podrías hacer en un envase grande que puedas tapar con papel plástico de cocina, y remover la carne cada cierto tiempo.

4. Refrigerar a buena temperatura

Siempre que vayas a marinar una carne, recuerda que estás trabajando con alimentos crudos, por lo tanto, es importante tomar todas las medidas necesarias para su conservación.

Una vez que has marinado la carne, esta debe estar un buen tiempo en esa sazón para que absorba los sabores. Por eso debes procurar mantenerla bien refrigerada, ya que los microorganismos suelen proliferar a temperaturas entre 5º y 40º C.

En este punto valdría la pena preguntar qué tiempo debe permanecer la carne marinándose para que el adobo haga su trabajo.

Pues bien, esto depende de la carne que elijas preparar, ya que un lomo no tiene la misma textura que otras proteínas.

Entonces, si por ejemplo vas a preparar cortes típicos como piernas, filetes, lomo o chuletas, podrías dejarlos marinar desde la noche anterior al día del asado.

Más datos de interés

Un consejo referido a la salubridad: ten en cuenta que una marinada es una mezcla de ingredientes básicos con los jugos de una carne cruda, por lo tanto, no uses nunca la misma marinada dos veces porque es un riesgo para la salud.

Lo que sí puedes hacer es separar un poco de la marinada antes de adobar la carne y reservar para que puedas cubrir la carne en el momento que empieces a asar.

Recuerda, la marinada que ha sido pasada por la carne cruda debes desecharla, y no reutilizarla.

Y ahora sí, una buena cocción

Una vez que has terminado con el proceso de marinado, tu carne ya está lista para ir al asador. Y este punto también es fundamental para obtener una carne jugosa y cocinada en su punto.

Es importante que sepas que cada alimento tiene su propia temperatura interna. También depende del corte de carne que quieras asar y el tipo de cocción que quieres que tenga.

Si, por ejemplo, vas a asar filetes, estos se deben hacer a una temperatura aproximada de 42º C. Esto quiere decir que los debes poner poco tiempo al fuego porque rápidamente cogerán temperatura, y lo ideal es que queden tiernos por dentro.

En este sentido, mientras más cocida quieras la carne, más tiempo debes dejarla en el asador. Pero ten control de ello porque si la expones al calor más de lo necesario, entonces te quedará muy seca.

Ya lo sabes. Una buena marinada debe tener un sabor limpio. Aquí se aplica la máxima de que menos, muchas veces, es más.

Así que ya lo sabes, si quieres impresionar a familia o invitados con una buena carne asada, asegúrate de elegir un tema simple, con ingredientes básicos que ayuden a mejorar el sabor de la carne.

Al final obtendrás un resultado que todos querrán saborear y, sobre todo, podrán disfrutar de un momento de unión, que con el tiempo se podría convertir en una divertida tradición.

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