¿Cómo dejar de sentirse agobiado por los problemas?

Según un reporte presentado por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el 75% de los mexicanos padece fatiga por estrés. Y aunque muchas veces buscamos evitarlo, lo cierto es que entre más lo intentemos, más se presenta.

Hoy en día el mundo se mueve muy rápido y las noticias no nos dejan descansar. Es común que el trabajo y los estudios sean relacionados con grandes olas de estrés. Además, la constante exposición a los medios sociales es un factor que muchas veces no tomamos en cuenta, pero impacta directamente en el padecimiento del estrés.

Sí, es normal sentirse agobiado, pero no la mayoría del tiempo, sino en momentos que realmente sean inusitados. ¿Te parece imposible? No es así.

Existen muchos consejos que te pueden ayudar a volver esos recurrentes episodios de estrés en momentos temporales que no repercutan en tu salud emocional y física.

¿Quieres conocerlos? ¡A continuación te presento 6 tips para disminuir el sentirse agobiado!

1. Mantén la calma

Sí, pensarás que es muy fácil decirlo, ¿no? Llevarlo a la práctica podría parecer imposible, pues el sentirse agobiado impide que encontremos una salida a los problemas.

Cuando te llegue una mala noticia o se presente una situación inesperada, lo primero que debes hacer es no tomar una decisión apresurada. Quizá es difícil imaginarlo, pensando en que tienes que actuar cuanto antes, sin embargo, no podrás solucionar nada si tienes los pensamientos revueltos.

Debes tener claro que para encontrar una respuesta, lo primero que debes hacer es entender la situación y ponderar opciones. Entonces, ¿cómo abrir camino a las alternativas? Con respiración profunda.

2. Respiración tranquila y constante

Los fuertes momentos de estrés suelen activar las señales de alarma de nuestro cuerpo. Nuestra respiración empieza a acelerarse o entrecortarse, lo que impide que las neuronas reciban la oxigenación adecuada.

Para que nuestro sistema se mantenga trabajando en óptimas condiciones, tenemos que asegurarnos de que haya un buen flujo de aire, así nuestro cerebro se encargará de solucionar problemas en lugar de huir de lo que parece ser un peligro inminente.

Para esto, siéntate con la espalda recta y los pies bien firmes en el suelo. Comienza a inspirar profunda y suavemente por 5 segundos, aguanta la respiración 3 segundos y exhala al mismo tiempo en que tu tórax y abdomen se relajan.

Lo recomendable es hacer esto 10 veces, pero en cuanto notes que el flujo de pensamiento ha retomado un ritmo sereno, estarás listo para hacerle cara a la situación y tomar decisiones.

3. Cambia de perspectiva

Cuando uno comienza a sentirse agobiado se le nubla hasta la vista, y es que es común que las condiciones imprevistas sean tachadas como problemas, pero recuerda que preocuparse no resolverá nada. Lo ideal es ocuparse, ¿no es así?

Debes dejar de mirar a los asuntos por resolver como "catástrofes". La frustración y el enojo no te llevarán a nada.

La vida está llena de desafíos y uno de ellos, aunque se escuche contradictorio, es ser feliz. Y lo es no porque sea difícil y mucho menos imposible (¡de hecho la oportunidad siempre está ahí!), sino porque necesita de nuestra mejor actitud para percibirlo.

Entonces, para encontrar soluciones debes tener la perspectiva de que un desafío es un escalón más que te permitirá acercarte a tus metas.

4. Organízate

El agobio está directamente relacionado con el desorden, no solo físico sino también mental. Y es que aunque cada persona tiene su orden y establece sus ritmos de trabajo, lo cierto es que debe estar consciente de cómo llevar a cabo sus tareas, actividades y descansos.

No esperes a crear una estrategia recién cuando el desafío se presente. Una excelente forma de organizar tu tiempo es tomando en cuenta situaciones inesperadas o apuradas, sobre todo si en tu profesión son recurrentes.

Contar con un horario, agenda o un tablero de actividades no solo resolverá asuntos tangibles y organizacionales, sino que también permitirá que tu mente visualice los asuntos por resolver de forma más clara y menos opresiva.

5. Cumple con tus horas de sueño

Encontrar motivación para el trabajo, para estudiar o emprender suele ser una de las cosas más difíciles. El dormir es muchas veces subestimado e incluso se ha llegado a celebrar dormir menos, sin embargo, no dormir lo suficiente repercute tanto en nuestro estado anímico como en el fisiológico.

Pero, ¿cuánto es suficiente? La Clínica Mayo sugiere entre 7 y 8 horas de sueño, de lo contrario el estado de salud será deficiente, además de que afectará la toma de decisiones y aumentará la ansiedad.

Un cuerpo descansado es un cuerpo lleno de energía, ánimo y seguridad. Procura cumplir con tus horas de sueño para que estés listo para iniciar un día lleno de aventuras.

6. No evites el estrés

Como dije antes, los momentos dificultosos despiertan las alarmas de nuestro cuerpo y, al tomarlo como peligro, queremos huir de él, sin embargo, intentar no estresarse no hacer otra cosa que aumentar el estrés.

Es normal y cualquiera lo sufre. Algo que podría ayudarte a deshacerte de la ansiedad que te provoca es desahogarte. No te avergüences de llorar, si así lo sientes, es necesario que escuches lo que tu cuerpo te pide.

Anímate a hablar con alguien o expulsa las emociones mediante actividades terapéuticas como escribir, pintar, correr, cantar... quién sabe, ¡podrías terminar descubriendo un talento oculto!

¡Ya tienes 6 tips para evitar sentirse agobiado! ¿Lo ves? No es imposible.

Recuerda que no todo en la vida es trabajo, problemas y estrés. Si mantienes estas buenas prácticas lograrás superar cualquier desafío. Para ayudarte a continuar con tu día, quiero compartirte estos videos motivacionales que te inspirarán para mantener el enfoque que necesitas. ¡No te los pierdas!